Hace unos días nos enteramos de que una pareja de norteamericanos había diseñado un “asfalto solar” compuesto por celdas solares hexagonales que permitirá generar electricidad para uso doméstico y para impulsar los coches eléctricos que circulen sobre él. Si la idea prospera y es realmente viable, la red de carretera se convertirán en una “smart grid”, ya que estos paneles solares incorporan luces LEDs que servirán como señalización nocturna y acumuladores de calor para evitar la formación de hielo y la acumulación de nieve, haciendo así que la conducción sea más segura.
Los paneles “Solar Roadways” inventados por Julie y Scott Brusaw están adaptados para resistir el tráfico pesado y están bajo una capa de vidrio de alta resistencia configurado para que tenga las mismas características de seguridad que el asfalto que cubre hoy en día nuestras carreteras y autopistas, por lo que la seguridad sería similar a la que ya disfrutamos al conducir, con el añadido de que no tendremos que volver a hacerlo sobre hielo.
De todas maneras, esta red solar de carretas tendría que estar conectada a la red eléctrica, ya que por sí misma no podría sustentar el gasto de energía que producirían los calentadores y a que el rendimiento no sería homogéneo. Hay que tener en cuenta que no es lo mismo una carretera en Andalucía, con muchas horas de sol y temperaturas benignas que en los Pirineos, con un clima mucho más frío y con menos horas de sol, sobre todo en invierno que cuando se necesitaría mayor aporte de energía para evitar la formación de hielo.
Otra de las ventajas de este sistema modular de paneles solares es el mantenimiento, ya que si uno falla o se rompe (aunque puede aguantar más de 100 toneladas de peso), solamente hay que sustituirlo sin tener que realizar grandes obras ni cortar el tráfico de la vía. Desde Taxiberia estaremos atentos a este tema, que aún se haya en fase experimental y veremos si poco a poco comienza a implantarse como una alternativa limpia y sostenible al actual sistema de asfaltado de carreteras.